Salud Dental y Alergia Primaveral
La alergia primaveral puede afectar a nuestra salud oral de diferentes modos:
1. Sequedad de boca (xerostomía):
Si padecemos rinitis por algún tipo de alergia (lo cual es muy común), la nariz se tapona y tendemos a respirar por la boca. Como consecuencia, la boca suele estar más seca. Otro motivo por el que los alérgicos suelen tener menos hidratada la boca, es un efecto secundario de los medicamentos que toman.
Los conocidos antihistamínicos que aplacan los síntomas de la alergia provocan, sin embargo, cierta sequedad bucal.
2. Dolor dental:
Cuando padecemos rinitis alérgica no paramos de estornudar y generar moco. Pues bien, éste puede acumularse en los senos paranasales o senos maxilares, unos espacios interiores de la cara que se extienden desde los lados de la nariz hacia la zona contigua a los dientes. Cuando la acumulación es considerable, las molestias afectan incluso a la dentadura, ya que ejerce presión sobre los molares superiores.
3. Mala higiene bucal por síntomas de la alergia:
Esta relación no es exactamente fisiológica, sino una concatenación de circunstancias que conducen a malos hábitos de higiene bucal. Los síntomas de las alergias primaverales son muy molestos, no cabe duda. Pero en ningún caso, debemos permitir que afecten a los cuidados dentales y nuestros cepillados después de cada comida. Es frecuente encontrar cómo el dolor de garganta provoca que algunas personas alérgicas dejen un poco de lado la higiene dental, ya que el cepillado les provocan molestias.
Leave a replyEn definitiva, es conveniente estar atentos a los síntomas y efectos colaterales de las alergias primaverales sobre nuestra salud dental.